En un fallo que se dio a conocer este martes 8 de septiembre desde el máximo Tribunal de Alzada departamental, se ratificó la medida que le impus en primera instancia el juez de Garantías Federico Barberena a Néstor Félix Hirtz el 10 de agosto.

De este modo, el productor agropecuario de 66 años continúa acusado de "homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego" por el suceso ocurrido el 5 de julio de este año. Hirtz disparó a Tomás Echegaray, amigo de su hijo, desde no más de dos metros de distancia cuando ambos jóvenes ingresaban a su hogar. Según declaró el acusado, tuvo la intención de hacerle una broma. El hecho derivó en la muerte del joven de 26 años oriundo de Tapalqué.

El fallo que ratifica la prisión preventiva para Hirtz fue emitido desde la Cámara Penal en respuesta a un recurso de apelación presentado por los abogados defensores, Ricardo Boucherie y Juan Carlos Scirica. El mismo fue rechazado por "improcedente", quedando confirmada en esta instancia aquella medida cautelar que el mes pasado se había traducido en que la detención del imputado fuera convertida en prisión preventiva.

En el fallo de la Cámara, resulto por unanimidad, se indicó que las pruebas incorporadas hasta el momento a la causa revelan que "al menos con el grado de probabilidad positiva que se requiere en esta instancia, Hirtz efectivamente quiso disparar su arma de fuego".

El encausado declaró al ser indagado en sede judicial que, queriendo hacerle una broma al amigo de su hijo, se la había "escapado" el disparo con el revólver Smith & Wesson calibre .44 Magnum, que estaba cargado con 5 proyectiles.

Néstor Hirtz permanece privado de su libertad desde el mismo 5 de julio cuando fue aprehendido luego de acercarse al centro asistencial de Tapalqué a preguntar por el estado de salud de Tomás Echegaray y referir a los policías lo que había sucedido en su casa.

De resultar condenado en el juicio por homicidio agravado, podría recibir penas que van desde los 10 hasta los 25 años de prisión. Actualmente está preso en la Unidad 7 de la cárcel de varones del Servicio Penitenciario Bonaerense con asiento en Azul.

"Hirtz es una persona que sabe de armas de fuego y tiene un dilatado historial en su uso, por lo que no se puede adjudicar su disparo a la ignorancia o impericia propia de las personas inexpertas en el manejo de armas", escribió en un tramo del fallo el camarista Carlos Pagliere (h).

"De la causa se desprende que, además, tenía por costumbre hacer 'bromas' -que sólo a él le causaban gracia-, las cuales consistían en esgrimir armas de fuego a terceros. E incluso, disparar las mismas en dirección a las personas".

Más adelante, el magistrado señaló: "La valoración racional de la prueba expuesta indica, a todas luces, que la hipótesis más probable es que el disparo haya sido voluntario. Y por ende, que la 'broma' no consistía en exhibir el arma a Echegaray para luego rociarlo con alcohol -como alega Hirtz- sino exhibir el rociador con alcohol para luego asustarlo con el estruendo del arma de fuego".

"Habiendo establecido como hipótesis más probable que Hirtz tuvo la voluntad de disparar su arma de fuego, el dolo eventual de su accionar se torna patente. Ello así por cuanto, en base a la mecánica de lo acontecido, es un hecho comprobado que el imputado disparó un arma de fuego a sabiendas de que la víctima Tomás Echegaray se hallaba a muy corta distancia y se dirigía hacia él", se refiere también en la resolución.

Fuente y foto: Diario El Tiempo