El gobierno de Axel Kicillof encara una semana clave con la apertura de las paritarias salariales en la provincia de Buenos Aires. Docentes, judiciales y estatales ya se preparan para encarar una negociación que tiene como antecedente próximo el aumento que se le cedió a la policía bonaerense.
 
La Provincia, a través del Ministerio de Trabajo que conduce Mara Ruiz Malec, ya cursó las citaciones a los distintos gremios para dar el puntapié inicial en las discusiones. El cronograma de encuentros comenzará con los estatales, luego será el turno de los docentes y cerrarán la semana con los judiciales.

El miércoles 23 a las 14 será la inauguración de las paritarias con los gremios que representan a los trabajadores estatales de la administración pública. En ese sentido, desde ATE calificaron como “muy importante” al llamado y manifestaron que “es necesario un aumento salarial urgente para todos los estatales, activos y jubilado”.

Esta negociación es para quienes estén comprendidos en la Ley 10.430 y el primer inconveniente surgido es el reclamo que hace la Asociación de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires (Cicop). Es que la reclaman que sean llamados para discutir los salarios en el marco de la Ley 10.471, donde se encuentra la porción mayoritaria de los trabajadores del sector.

El jueves 24 entrarán en la conversación los gremios del Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB), una negociación que siempre fue caso testigo y que marca el termómetro en la Provincia. No obstante, en un año en el que además de la pandemia de coronavirus se destapó el conflicto con la policía bonaerense, las expectativas no dejan de ser altas por el gran número de trabajadores de la educación existente.

“Los Trabajadores de la Educación, firmemente comprometidos y día a día, garantizan la continuidad pedagógica afrontando esfuerzos económicos para ejercer dicha tarea. Resulta fundamental una recomposición salarial a los docentes bonaerenses para los próximos meses”, expresaron los docentes del FUDB.

El viernes 25 concluirá la semana con la reapertura de las paritarias en el ámbito del Poder Judicial. Desde la Asociación Judicial Bonaerense (AJB) no se olvidan del poder adquisitivo que perdieron durante la gestión de María Eugenia Vidal y piden una recuperación. Además, señalaron que el 9% de aumento firmado en este 2020 es insuficiente y plantean un nuevo incremento.

“Vamos a la reunión paritaria a exigir que se ponga fin a la caída de los salarios de las y los judiciales. Es inaceptable que hoy un compañero o compañera que ingresa al Poder Judicial reciba un salario de bolsillo de $29.800 pesos, mientras que la línea de pobreza supera los $44.500. Para empezar a salir de esta situación tenemos que recomponer lo perdido en 2020 y avanzar en la recuperación del salario perdido en 2018 y 2019”, sostuvo Pablo Abramovich, secretario General de la AJB

El gobierno de Kicillof encara las paritarias con un antecedente próximo: el aumento salarial cedido a la policía bonaerense tras la violenta y repudiada protesta que llevaron a cabo. El hecho genero malestar en los gremios y provocó desazón en los profesionales de la salud que se encuentran en la primera línea en plena pelea contra el coronavirus.

La suba de sueldos para los uniformados incluye un bono no remunerativo por única vez de $ 5.000. Así, un ingresante oficial cobrará $44.500 de bolsillo. En tanto, será de $ 33.583,39 para los sub-escalafones. Un Comisario General percibirá $168.361,10; Comisario Mayor, $119.989,48; Comisario Mayor, $119.989,48; Comisario Inspector, $105.766,47; Comisario $90.836,60

De este modo, esta situación predispone de otra manera la forma en que los sindicatos encararán la negociación y carga de una mochila con mayor peso al Gobierno bonaerense que debe dar respuestas a los bolsillos de los trabajadores en el marco de la crisis económica profundizada por la pandemia.