Tras ser sancionada el último 10 de septiembre, el Gobierno bonaerense promulgó la adhesión de la provincia de Buenos Aires a la Ley nacional de Parto Respetado -conocida también como Ley de Parto Humanizado-, que establece los derechos que tienen tanto madres, como padres e hijos durante el proceso de nacimiento.

La norma 25.929 fue sancionada en el Congreso en el 2004 y garantiza el derecho a un parto sin discriminación y que respete los tiempos y la intimidad de la persona gestante. Además, permite que sea ella quien elija a la persona que la acompañará durante el trabajo de parto, el parto y el posparto, y asegura que el bebé pueda estar en su cuna, al lado de la camilla, durante toda la internación (a menos que necesite cuidados especiales).

También incluye el derecho a recibir información sobre las distintas intervenciones médicas que pueden tener lugar durante el proceso, incluidas la existencia de complicaciones, ventajas e inconvenientes de los posibles tratamiento, y a decidir libremente la forma y posición en el momento del parto.

A través de la norma, la persona gestante también tiene derecho a no ser sometida a ningún examen o intervención cuyo propósito sea de investigación y a recibir toda la información necesaria, en un lenguaje claro, sobre el estado y la evolución del parto y del bebé, los beneficios de amamantar, los cuidados que necesitan tanto el recién nacido como quien acaba de dar a luz y la anticoncepción durante el puerperio. A su vez, dispone que toda entidad pública o privada que preste servicios médicos de este tipo deberá capacitar o recibir una capacitación a cargo del Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual.

"Tenés derecho a ser considerada, respecto del proceso de nacimiento, como una persona sana, de modo que se facilite tu participación como protagonista de tu parto", remarcan desde el área de Salud del Gobierno nacional respecto de la ley de Parto Respetado.