A través de la plataforma Zoom se realizó el viernes pasado la presentación de la Agenda Legislativa Nacional de las Organizaciones Sociales con el objetivo de fortalecer la organización comunitaria. Con una alta participación y por más de dos horas estuvieron presentes de forma virtual 460 personas que desde diferentes regiones del país apoyaron este tipo de medidas cuyos principales beneficiarios serán los niños, niñas y adolescentes.

En representación del Programa Cumelen estuvo su director general Eduardo Vera quien es además el vicepresidente de la Federación de Organismos No Gubernamentales de la Argentina para la prevención y el tratamiento del abuso de drogas (FONGA) que nuclea más de 60 organizaciones, varias de las cuales dedicadas a la Niñez y Adolescencia.

Con el lema “La Ternura Será Ley”, la diputada nacional Claudia Bernazza (Frente de Todos) quien es magister en Educación, doctora en Ciencias Sociales, docente, escritora y dirigente social, presentó un conjunto de medidas entre las que se incluyen las Respuestas Comunitarias en Niñez y Adolescencia, la Creación del Instituto Nacional de la Organización Comunitaria y la implementación de un Régimen para Trabajadores/as Socio Comunitarios/as.

Qué dice el proyecto de ley El principio rector de la norma está basado en que “el vínculo comprometido y estable que entablan una o más personas del entorno familiar comunitario con niñas, niños y adolescentes permite a éstos últimos el ejercicio de sus derechos. Esta vinculación se reconoce, a los efectos de la presente ley, como Respuesta Comunitaria”.

Además estipula solicita la creación del Instituto Nacional de la Organización Comunitaria como “único organismo de reconocimiento, inscripción, registro y fiscalización en todo el país, lo que permitirá contar con un mapa de estas personas jurídicas diferenciado del de las entidades comerciales o con fin de lucro, con un control acorde a su tarea”.

El tercer punto destacado es el Régimen para Trabajadores/as Socio Comunitarios/as, que estipula el “establecimiento de un encuadre normativo que permita asumir y resguardar las diferentes relaciones que se establecen en una Organización Comunitaria y reconocer tanto el voluntariado como las relaciones laborales que surgen en el marco de la implementación de políticas públicas, garantizando su salario, el acceso a la Salud y la Seguridad Social a la que todo trabajador tiene derecho.

Finalmente se estipula la creación de la figura de bien de utilidad social que implica la inembargabilidad e inejecutabilidad de los bienes inmuebles de carácter único; la implementación del Balance Social obligatorio para las organizaciones que será considerado como registro contable; reconocimiento a las organizaciones comunitarias como sujetos no imponibles y facilitación del acceso al Régimen Tarifario Específico para Entidades de Bien Público promulgado hace cinco años.