Esta semana se llevó a cabo una audiencia en la Delegación Regional del Ministerio de Trabajo que tiene sede en nuestra ciudad, a cargo del doctor Lucas Miriuka, debido a la denuncia por violencia laboral que llevaron a cabo trabajadores contra un jefe de la empresa Ferrosur Roca, por lo que quedó asentado de esta manera un importante precedente en materia judicial.

Por los trabajadores estuvieron presentes Julio Laborde (directivo a nivel nacional del gremio APDFA, Asociación del Personal de Dirección de Ferrocarriles Argentinos Administración General de Puertos y Puertos Argentinos) y Sergio Aranzábal (secretario general de APDFA Olavarría), acompañados por el doctor Juan Sánchez y Viviana Gómez y Estela Peralta, integrantes del Nodo Centro de la Red Nacional de Violencia Laboral, integrantes también de la Mesa Intersindical olavarriense, acompañadas por Beatriz Arguello, secretaria de Derechos Humanos del mencionado nodo. Por la empresa, en dicha audiencia estuvieron presentes Martín Arce (líder de recursos humanos) y el abogado Dr. Gustavo Blanco.

“Quedó el expediente en reserva. Sólo pedimos que a ese jefe lo cambien de lugar, porque es una víctima también seguramente, pero queremos que se recupere, no pretendemos que lo echen de la empresa. Ante ese pedido que hicimos en una oportunidad, la empresa no hizo absolutamente nada. Es más, luego de nuestra denuncia ese jefe se presentó más agresivo que antes y dijo a la gente que a determinadas personas no les hablan, quiso marginar al denunciante. Obvio que nuestro compañero terminó yendo al psicólogo” explicó Sergio Aranzábal, dirigente del gremio a nivel local, respecto de la situación que se vive en Ferrosur Roca, empresa que pertenece a la multinacional Camargo Correa (también propietaria de Loma Negra).

“Todo se originó durante la pandemia cuando esa persona tuvo que reemplazar a otro jefe, que se tuvo que quedar en su casa porque era de riesgo. Pero notamos enseguida que este nuevo jefe tiene un perfil que no va bien en lo que es el trato con personal a cargo. Hablamos con la empresa enseguida y con Recursos Humanos para explicarles la situación que se estaba viviendo y entonces hicimos la denuncia”, continuó explicando el dirigente.

“Primeramente fuimos a la Oficina de Asesoramiento de Violencia Laboral, a cargo de Patricia Sanz. Nosotros queremos respeto, por supuesto, en el trato. Pero la situación es difícil porque el denunciante sigue estando en contacto directo con el denunciado. Así que luego de haber estado en Buenos Aires pero como luego no pudo continuar por tema de protocolo, quedamos acá para hablar con el doctor Lucas Miriuka, a cargo del Ministerio Regional Delegación Olavarría y nos atendió enseguida y muy bien. Pedimos audiencia, que se hizo hace tres semanas, y planteamos el tema. Necesitamos que lo aparten de ese cargo, queremos que la empresa lo ayude con un psicólogo, pero la empresa no quiso hacer nada de eso. Pero es una persona agresiva, genera problemas y la gente ya trabaja con miedo cuando en realidad debería estar contenida” siguió contando.

Son tres las víctimas de violencia laboral por parte de este jefe, que los maltrataría y también intentó marginarlos de sus restantes compañeros. “Así que ante esta situación volvimos al Ministerio de Trabajo. Porque ese jefe empeoró el trato con los trabajadores en cuestión. Nosotros seguimos insistiendo en que lo corran de ese lugar, que lo capacitan –también al resto de los trabajadores- sobre violencia laboral, para que esa capacitación sea en todos los niveles de la empresa, para que todos conozcan cómo se debe trabajar”, agregó.

“Ahora estamos esperando la respuesta de la empresa. Todo lo que expusimos consta en actas y eso está en la Delegación Regional del Ministerio de Trabajo a cargo del doctor Miriuka. Ahora habrá que ver cuál es la postura de Ferrosur Roca, que se comprometió a solucionar el problema. Aunque la empresa tiene una postura incoherente y que no es aceptable, inclusive insólita porque el abogado de Ferrosur Roca sostuvo que si nosotros exigimos que este jefe vaya a un psicólogo, le estamos haciendo mal a esa persona, la estaríamos discriminando por lo que no quieren apartarlo del cargo. Pero las especializadas en violencia laboral nos explicaron que no es así”, afirmó.

“Si no tendríamos que dejar todo como está, porque según el abogado no debería exigirle a ese jefe a ir a un psicólogo. Nosotros le respondimos que en otros casos, con otros compañeros, la empresa sí le ordenó que hagan un tratamiento porque si no lo despedían. Hay un discurso incoherente de la empresa, con argumentos que no tienen sustento para defender su posición. A este jefe, entonces, de acuerdo con lo que dice el representante legal de la empresa, no se le podría pedir nada, no se le puede exigir que haga un tratamiento, no se lo puede sacar de ese puesto de trabajo y, supuestamente, sólo hablando con él se solucionaría el problema. Es decir, una persona agresiva se recupera hablándole, de acuerdo con la idea del abogado de Ferrosur. Y eso es algo inaceptable”, sostuvo Aranzábal.

"Estamos esperando que lo solucionen cuanto antes, ya que si no hay solución entonces nos reservamos el derecho a tomar medidas de acción directa”, terminó diciendo Sergio Aranzábal.