En la tarde del sábado, momento en que se producían fuertes ráfagas de viento en la ciudad y en la región, se produjo un confuso episodio de tránsito que estuvo cerca de terminar a las piñas. 

Se desarrolló sobre la calle Rivadavia casi Del Valle, donde debido a los gritos y la tensión se apostaron unos cuantos transeúntes y se acercaron dos patrulleros con agentes policiales para controlar la situación. 

Un hombre que conducía un automóvil marca Honda acusó a otro de haberle "tocado" su coche. Sin embargo, el vehículo supuestamente dañado no presentaba marcas de haber sufrido un roce reciente. Por tal hecho y ante los gritos y discusiones que se produjeron, dos patrulleros acudieron al lugar a interiorizarse de lo ocurrido. 

Luego de varios minutos de diálogo, intercambiar datos y realizar llamadas, la calma irrumpió en el lugar y todos los involucrados se retiraron del lugar.