Desde la Subsecretaría de Seguridad del Municipio, como es habitual, se emitió este lunes un nuevo informe con las últimas actuaciones realizadas en materia de seguridad vial.

Comprende el resultado de los controles de tránsito, alcoholemia y nocturnidad, que se vieron reforzados en distintos puntos de la ciudad, tanto en horario diurno como nocturno, con personal perteneciente a la Dirección de Control Urbano.

Del 16 al 22 de marzo, se realizaron un total de 50 actas de tránsito y se retuvieron 16 vehículos (12 automóviles y camionetas y 4 motos) y 3 licencias de conducir.

En dicho período se detectaron cuatro casos de alcoholemia positiva, el más alto fue de 1.86 g/l. Se registró a las 00:57 del domingo 21 en la intersección de Avda. Colón y Avda. Pellegrini y corresponde al conductor de un Fiat Palio.

En Guisasola al 3600, a las 04:40 horas del domingo, se comprobó un nuevo caso de 1,44 gl, tras realizar el test de alcoholemia al conductor de un Peugeot Compact.

En el tercer caso se verificó que un automovilista que circulaba en un VW Gol presentaba un porcentaje de 1,02 g/l, en Necochea al 2800, a las 00:53 horas del viernes 19.

Finalmente en Avda. Del Valle al 2200,  se constató que el conductor de una camioneta Peugeot Partner manejaba con 0,91 g/l de alcohol en sangre. Este caso fue detectado a las 01:50 horas del sábado 20.

El informe se completa con los datos de nocturnidad, que comprende los controles en bares, boliches y fiestas privadas, con un total de 21 actas de inspección y 9 de infracción.

Conductor designado                                                                              

En el marco de la campaña de concientización vial “Conductor designado” se recuerda que aún en concentraciones menores el alcohol produce importantes consecuencias en el organismo, generando alteraciones en el comportamiento y disminuyendo la capacidad  de conducir de manera idónea.

En todos los casos, el consumo excesivo provoca consecuencias, sobre las funciones psicomotoras, sobre la visión del conductor y sobre el comportamiento y la conducta.

El conductor experimenta un falso estado de euforia, seguridad y confianza en sí mismo, apareciendo un desprecio por el peligro y una tendencia a transgredir las normas.

En este sentido, se hace hincapié en la importancia de elegir un conductor designado a la hora de conducir, con el propósito fundamental de cuidar la vida propia y de terceros.