“Si bien respecto de la semana anterior tenemos un enlentecimiento en la curva de casos, el número de casos que registramos continuaba superando los 10.000 por día”, precisó la funcionaria a Télam Radio.

“De ese número de casos que se viene registrando, una proporción se enferma en forma grave o moderada y necesita internación. A este ritmo de ocurrencia de casos, no podemos garantizar que no haya saturación de los servicios“, apuntó Varela.

Ante este escenario, Varela indicó que es “necesario” que “descienda el número de casos” de personas con coronavirus para que “haya un margen de seguridad de que no va a ocurrir una saturación de los sistemas” públicos y privados de salud en el principal distrito del país.

A días de que se cumpla el último DNU con medidas restrictivas para hacerle frente a las segunda ola de coronavirus, Varela indicó que “se están evaluando las nuevas medidas a tomar, las cuales probablemente requieran sostener las restricciones de movilidad para reducir el número de casos, sobre todo para garantizar la atención de todos los pacientes”.

En las últimas dos semanas, la provincia registró un promedio de 11.700 casos positivos de coronavirus por día, constituyendo quizás el período más grave desde el inicio de la pandemia.

El primer pico de casos en la provincia había sido registrado entre el 24 y el 31 de agosto de 2020, cuando llegaron a 5.845 en promedio diario. Después, los positivos fueron bajando lentamente y en la semana del 7 al 13 de diciembre tocaron un piso de 1.365.

Ante el posible colapso del sistema sanitario y de agotamiento de los recursos humanos especializados para tratar pacientes con Covid-19, será necesario más que nunca poner prioridad a las medidas de cuidado individual y social.

El comportamiento ciudadano sumado al avance del plan de vacunación, serán la clave para que en unos meses la pandemia comience a controlarse y la replicación viral a decaer.