La mujer falleció en el sanatorio Güemes de la Ciudad de Buenos Aires, donde había sido trasladada para ser atendida por la golpiza recibida.

Chaves fue atacada en su vivienda de la calle Santos Plaza al 100 de la ciudad de Bolívar.

Según fuentes locales, la mujer fue encontrada por su hija. Luego de la golpiza, había tratado de levantarse y salir a la vereda para pedir auxilio. Cuando entre otras personas intentaron reanimarla vieron a su exmarido, Teófilo Díaz (73), que intentaba escapar, y fue aprehendido por la Policía. En poder del hombre estaba el teléfono de su víctima y se comprobó que en el figuraban mensajes que se intercambiaban Chaves y Díaz donde daban cuenta de que habían retomado su relación, no obstante las denuncias previas que el asesino tenía por violencia de género.

La mujer, que tenía golpes en el rostro y en todo su cuerpo, de inmediato fue trasladada al hospital Miguel Capredoni. Allí fue internada en la Unidad de Terapia Intensiva y luego derivada al sanatorio porteño, donde falleció en la madrugada del viernes.

Díaz quedó detenido por “tentativa de femicidio”en ese momento. Tras el deceso de la mujer, el acusado fue imputado por la fiscal Julia Sebastian, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 15 descentralizada en Bolívar, por el delito de “homicidio doblemente calificado por el vínculo y por ser cometido por un hombre contra una mujer en contexto de violencia de género”, que prevé prisión perpetua.

Tras conocerse la muerte de Graciela hubo una marcha por la ciudad en pedido de justicia y contra la violencia de género, que pasó por la Fiscalía local y la Comisaría. El martes, a pocas horas de la agresión, ya se había realizado otra movilización similar.

Al parecer la discusión que llevó a la muerte de la mujer comenzó el viernes 10, cuando Chaves y Díaz salieron a bailar con otra pareja en la localidad de Unzué. El domingo la mujer se fue a pasar el día a una quinta y cuando volvió él estaba esperándola. Entraron y se quedaron solos, y momentos más tarde los vecinos empezaron a escuchar gritos. Entonces la mujer intentó contactarse con su hija por teléfono; en medio de la llamada el agresor le quitó el teléfono, y comenzó el ataque a golpes de puño.

Graciela Chaves y Teófilo Díaz se habían separado en diciembre del año pasado luego de una relación de 30 años. Tenían una hija en común. Había varias denuncias de Chaves contra el hombre por violencia de género.