El Gobierno analiza por estas horas un plan para beneficiar a los más de 2 millones de monotributistas del país, que según palabras del propio presidente Alberto Fernández no ha sido “atendido adecuadamente” en el marco de la crisis desatada por el avance del coronavirus y su impacto en la economía.

Aunque no brindó detalles, Fernández dijo que “próximamente” iba a haber anuncios para el sector, compuesto por monotributistas y trabajadores autónomos que, sin recibir un sueldo fijo, quedan prácticamente sin ingresos al no poder salir de sus hogares a trabajar. El universo de este sector supera las 2 millones de personas, entre ellos más de 350 mil monotributistas sociales, que realizan sus aportes jubilatorios y de su obras social a partir de su facturación.

Por el momento, el Gobierno analiza si posterga el pago de las cuotas mensuales o realiza una recategorización de emergencia para evitar que sigan pagando según sus niveles de ingresos habituales, cuando en realidad se vieron mermados por la inmovilización de la economía.

Una de las opciones más probables es que se cancele el pago de la parte impositiva del pago, pero se continúe con la contribución social, que es lo que les permite a los autónomos el acceso a la obra social.

El Presidente aseguró que “hemos visto que hay un sector que hasta aquí no hemos atendido adecuadamente y quiero llevar tranquilidad a todos ellos. Es el sector de la informalidad y de los monotributistas. En los próximos días vamos a estar dictando normas que alivien el momento para todos ellos”. Las medidas serán tomadas por el ministro de Economía, Martín Guzmán, y la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont.

Se calcula que entre los monotributistas y quienes trabajan en la informalidad se encuentra el 40% de la fuerza laboral del país. Estos sectores no han sido amparados en los beneficios anunciados hasta ahora por el Gobierno, y en la mayoría de los casos su supervivencia depende del “día a día”.