El sindicato Luz y Fuerza celebró este martes, con un sencillo acto en el que no faltó la emoción y fundamentalmente ese sentimiento de familia lucifuercista que distingue tanto a este gremio que conduce el secretario general Eduardo Amaya, para celebrar sus 75 años de vida institucional. Poco después de las 9 los dirigentes y afiliados se reunieron en la sede sindical ubicada en Maipú 2150 donde tenían programada una serie de actividades para conmemorar este importante aniversario.

En primer lugar se izó la bandera nacional, en uno de los sectores parquizados de la sede sindical, y posteriormente todos se trasladaron hasta el Cementerio Municipal  ya que depositaron una ofrenda floral en recuerdo y homenaje a los trabajadores lucifuercistas fallecidos, quienes forman parte de la historia del sindicato.

Allí hizo uso de la palabra el secretario adjunto de LyF, Federico Zamora, quien señaló que “más allá de este momento religioso que representa dejar una ofrenda floral, también encierra este acto el reconocimiento y el homenaje a todos aquellos compañeros lucifuercistas que dejaron su granito de arena en el sindicato y que marcaron el camino, que hicieron historia en nuestro querido sindicato”.

Luego regresaron a la sede de la calle Maipú, donde se descubrió un mural que está en una de las paredes de acceso que reflejan distintos momentos del sindicato, como las capacitaciones, sus instalaciones con una vista imponente del edificio de su sede, las capacitaciones y –fundamentalmente- la lucha por los derechos y la dignidad de los trabajadores. Allí también habló Zamora para resaltar todos estos momentos, así como la presencia de los ex secretarios generales Enrique “Quique” Sánchez y Juan Daniel “Pelusa” Fredes, y el crecimiento permanente del sindicato con la conducción del actual secretario general Eduardo Amaya.

Después del aplauso general de todos los dirigentes y afiliados, así como empleados del sindicato, se pasó al sencillo acto de asunción de la nueva Subcomisión de Jubilados y Pensionados que continúa con la presidencia de Enrique “Cachi” Gallo.

La presentación del dirigente Emmanuel Tambucci fue precisa para hablar sobre los jubilados y pensionadas que siempre están presentes en esa nueva etapa de la vida, colaborando, apoyando y brindando un servicio a los demás compañeros que se retiraron de la vida laboral activa, manteniendo esa esencia de familia que siempre seguirá distinguiendo a los lucifuercistas.

Habló Gallo en la oportunidad para agradecer a la comisión directiva del sindicato por su permanente apoyo a los jubilados, para resaltar también que es una enorme satisfacción continuar trabajando y colaborando para los compañeros desde la subcomisión, lo que demuestra la solidaridad y la esencia de Luz y Fuerza. Para finalizar, todos se quedaron compartiendo un desayuno, a puro mate y facturas, charlando y recordando anécdotas de la familia lucifuercista. Y todo continuará el sábado 28 de mayo, cuando se realice la fiesta en el SUM.