El Gobierno legalizó el autocultivo de cannabis para uso medicinal y el expendio de aceites en farmacias

En julio de este año el ministro de Salud, Ginés González García y la viceministra Carla Vizotti presentaron de manera privada la nueva reglamentación de la ley de uso medicinal del cannabis a referentes de la ciencia y el activismo.

A las 00 horas de este jueves el Gobierno nacional publicó un decreto en el Boletín Oficial donde establece la regulación del cultivo doméstico y el expendio en farmacias de aceites y cremas producidas a base de cannabis. 

“Resulta impostergable crear un marco reglamentario que permita un acceso oportuno, seguro e inclusivo y protector de quienes requieren utilizar el Cannabis como herramienta terapéutica”, reza el decreto.

Durante años, a causa de la prohibición, miles de usuarios optaron por el autocultivo, generando así redes y organizaciones, pero muchas veces siendo criminalizados por ello.

A partir de este decreto que ya cuenta con la firma del presidente Alberto Fernández, se ve autorizado el cultivo personal y en red para usuarios, investigadores y pacientes con previo registro en el Programa Nacional de Cannabis (REPROCANN). 

Este registro permitirá la emisión de autorizaciones para el acceso controlado a la planta de cannabis y los derivados que de ella se produjeran, siempre con un fin terapéutico. Podrán inscribirse en el REPROCANN personas con indicación médica de uso terapéutico de esta planta.

De este modo, a partir de este jueves los "cultivadores solidarios" y en red podrán realizar sus actividades de manera legal. Además se sumará el expendio en farmacias habilitadas de "formulaciones magistrales". Es decir, aceites, cremas y otros productos a base de cannabis, lo que además permitirá el control de calidad de dichas producciones. 

Esta nueva reglamentación además asegura que el Estado garantizará provisión gratuita para quienes no cuenten con obra social o cobertura de salud, a inscriptos en programas específicos y procurará la promoción pública de programas de extensión universitaria vinculados al testeo de sustancias y cultivos de cannabis medicinal.

El ministerio de Salud, por su parte, deberá garantizar insumos para facilitar la investigación médica y/o  científica de la planta, así como de la producción regional, tareas hasta entonces exclusivas del INTA y el Conicet.

Fuente: Telam/Infobae